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Los peligros de las extensiones de pestañas que no conoces y te pueden afectar para siempre

Las extensiones de pestañas están de moda. Si se colocan y se retiran adecuadamente y con los materiales correctos no debería haber problema. Pero no siempre se hace así y las consecuencias son terribles.

extensiones de pestañas
Crédito: Bermix Studio (Unsplash)

Dicen que unas buenas pestañas son el mejor marco para hacer aún más bonita la mirada. También son el mejor salvavidas que tenemos para evitar que una infinidad de compuestos potencialmente peligrosos entren en nuestros ojos. Pero eso no vende tanto. La realidad es que a menudo nos olvidamos del papel protector y nos centramos en la estética, por lo que las extensiones de pestañas se han puesto de moda en los últimos años.

Primero fueron las pestañas postizas que cualquiera podía ponerse en casa. Pero no todo el mundo tiene la maña adecuada o no quiere perder tiempo en colocárselas, por lo que muchísimas personas recurren a los salones de belleza y estética que ofertan este servicio.

El problema es que, si no se ponen correctamente y no se cuidan los materiales, las extensiones de pestañas pueden ser peligrosas. Ya hemos visto que esos pelitos que rodean nuestros ojos tienen un gran papel protector, por lo que deberíamos cuidarlos muy bien y dañarlos lo menos posible. Además, la mucosa del ojo es muy sensible, por lo que los productos que se utilizan a su alrededor deben estar muy bien testados. Esto no siempre se hace bien y las consecuencia, según ha explicado en The Conversation el profesor y director del Centro de Aprendizaje de Anatomía Clínica de la Universidad de Lancaster Adam Taylor, pueden ser muy perjudiciales.

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¿En qué consisten las extensiones de pestañas?

El proceso de extensión de pestañas consiste en colocar pelo a pelo nuevas pestañas sobre las que ya existen naturalmente. Pueden ser de la misma longitud, si solo se quiere aumentar el volumen, o un poco más largas. Eso depende de lo que contrate cada persona.

Este pegado de las pestañas se realiza con adhesivos quirúrgicos. Esto significa que están desarrollados para que produzcan las mínimas alergias posibles, pero esto es imposible de asegurar. Por eso, muchos centros realizan una prueba el día previo en la piel de la muñeca. Si no hay reacción, ya se pueden hacer las extensiones de pestañas.

¿Cuáles son los peligros?

Puede darse el caso de que el adhesivo no genere reacción alérgica en la piel de la muñeca, pero sí que lo haga en la que rodea los ojos, pues es mucho más sensible.

Por otro lado, es importante que se coloque bien. En algunos centros las personas que realizan las extensiones de pestañas no tienen la formación suficiente, por lo que se han dado numerosos casos de personas a las que se les han quedado los párpados pegados por la colocación del adhesivo.

Además, no se pueden descartar problemas a largo plazo, pues se ha visto que en algunas ocasiones los pegamentos que se emplean contienen ingredientes cancerígenos sin declarar. Es, por ejemplo, el caso del formaldehído.

conjuntivitis
La conjunitvitis es uno de los efectos más comunes por una mala colocación de las extensiones de pestañas. Crédito: P33tr (Wikimedia Commons)

Enfermedades asociadas a las extensiones de pestañas

En 2012 se publicó en Japón un estudio en el que se analizaban los casos de 107 mujeres que habían acudido a clínicas oftalmológicas con síntomas aparecidos tras realizarse extensiones de pestañas.

Los diagnósticos fueron muy variados, pero en todo caso relacionados de un modo u otro con esta técnica de estética. Para empezar, lo más habitual fue la queratoconjuntivitis debida a la invasión de pegamento o agentes de eliminación, que se detectó en 64 pacientes. Por otro lado, 42 pacientes mostraron una inflamación de los párpados, conocida como blefaritis alérgica, posiblemente a causa del pegamento. En 3 pacientes se detectó erosión conjuntival debido a cintas fijadoras de párpados, motivo por el cual hubo una que también experimentó blefaritis alérgica. Finalmente, una paciente sufrió una hemorragia subconjuntival debido a la compresión durante la eliminación de las extensiones de pestañas. 

Vemos que no solo es peligrosa la colocación de las pestañas. También lo es su retirada. De hecho, si no se hace correctamente se pueden eliminar parte de las pestañas naturales, dejando los ojos más expuestos a infecciones.

¿Qué podemos hacer para evitarlo?

Hay personas que, en vez de las extensiones de pestañas, prefieren usar sérums para que las suyas crezcan más. Estos nuevos cosméticos tienen un origen muy curioso, ya que surgieron como tratamiento para el glaucoma. Se vio que uno de los efectos secundarios del fármaco era que las pestañas crecían más y más fuertes, por lo que se pensó que se le podría dar este uso. 

El problema es que estos sueros, compuestos normalmente por análogos de unas hormonas llamadas prostaglandinas, pueden causar tres efectos muy indeseados. Cambio irreversible del color del iris, pérdida de tejido graso alrededor del ojo y una afección, conocida como periorbitopatía asociada a prostaglandinas, que empeora el aspecto de las ojeras.

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Los sérums para pestañas pueden cambiar el color del iris del ojo. Crédito: Lukas Gejdos (Unsplash)

Por eso, si vamos a usar estos sérums, sería aconsejable revisar los ingredientes. También si queremos usar pegamentos para pestañas en casa. Finalmente, si optamos por las extensiones de pestañas en un salón de belleza, lo ideal sería que comprobemos las reseñas del centro y nos aseguremos de que en él trabaja personal cualificado. A veces, lo barato sale caro y si la salud está de por medio, el precio a pagar es aún peor. 

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