Integrantes del pueblo Weenhayek y Guaraní, del Chaco tarijeño, están preocupados por la falta de pases y la gran cantidad de sedimento en el río Pilcomayo. Piden intervención de las autoridades
Los pueblos Weenhayek y Guaraní, del Chaco tarijeño, conminaron a las autoridades a declarar zona de desastre al río Pilcomayo por la gradual desaparición del sábalo. La solicitud fue debatida este jueves en una reunión llevada a cabo en la comunidad de San Antonio.
También exigen a la Cancillería boliviana a convocar a una reunión internacional y de emergencia, a fin de tratar la actual problemática.
Otra de sus solicitudes es realizar un dragado para retirar la alta sedimentación en ese afluente que es compartido por Bolivia, Argentina y Paraguay, con una longitud de 1.590 kilómetros y forma parte de la Cuenca del Plata.


A este reclamo se sumaron la Asociación de Comerciantes de Pescado de Villamontes y otras entidades públicas que asistieron con sus representantes a la asamblea convocada por el capitán grande del pueblo Weenhayek, Francisco Pérez Nazario.
«No solo hemos tratado la escasez de pescado, sino también los sedimentos y los trabajos de ingeniería, hemos sacado las conclusiones para hacer llegar al señor Ábrego (ejecutivo regional del Gran Chaco) que como autoridad haga las diligencias ante la Cancillería», dijo Pérez.
El líder indígena indicó que están dando un plazo para que la reunión internacional se realice entre el 6 y 7 de julio próximo. Asimismo, lamentó la ausencia de los asambleístas, tanto regionales como departamentales, además de los asambleístas que representan al pueblo Weenhayek, Guaraní y Tapiete.
Un caso aislado fue la presencia del asambleísta departamental Jorge Sanguino, quien hizo referencia a la exigencia de los presentes de generar una Ley Departamental de Sistema de Monitoreo de Vida Hídrica y programas que ayuden éstos pueblos a combatir la crisis que golpea a esta sector por la falta de pescado en el río
Con información de El Deber