Su pareja, acusada de ser cómplice en el crimen, aún continúa en juicio.
El fiscal departamental de La Paz, William Alave, informó que, tras someterse a procedimiento abreviado, Steve Buddy Escobar Durán, de 24 años de edad, fue condenado a 30 años de prisión por quitarle la vida a su padre Roberto, de 64 años. El joven cumplirá su pena, sin derecho a indulto, en el penal de San Pedro.
“La Fiscalía presentó las pruebas contundentes colectadas, como el acta de colección de indicios materiales, declaraciones testificales, el protocolo de autopsia que determinó como causa de muerte shock hipovolémico por traumatismo cervical abierto punzocortante con un total de 56 heridas”, indicó Alave, según un comunicado de la Fiscalía General del Estado.
“Asimismo, el informe del investigador establece que el autor rompió el precinto policial para alterar la escena del crimen y eliminar cualquier evidencia. Además, el sujeto aceptó su culpa y fue sentenciado por el delito que cometió”, agregó.
El hecho se produjo casi un año atrás. El 2 de mayo de 2022, a horas 12: 40, aproximadamente, dos de los hijos de la víctima fueron al domicilio de su padre en la zona de Sopocachi, de La Paz, para verificar si estaba en el lugar, porque no lo habían visto recientemente.
Cuando los hijos ingresaron al inmueble no encontraron respuesta de su progenitor. Inmediatamente notaron que un cuarto que solía estar abierto, se encontraba con candado y con las cortinas cerradas. Al abrirlo sintieron un olor fuerte y encontraron a su padre muerto, con evidentes signos de violencia, debajo de una alfombra.
Tras revisar las cámaras de seguridad, las autoridades constataron que días previos al hallazgo del cuerpo, los únicos que ingresaron al domicilio fueron su hijo Steve y su pareja Yuliana.
Durante la investigación se determinó que el acusado agredió a su padre con un cuchillo y le ocasionó la muerte; mientras que la presunta cómplice, que actualmente sigue en juicio, se quedó observando y vigilando para no ser descubiertos. Posteriormente se llevaron los bienes y dinero de la víctima para luego huir del lugar.
Página Siete