En un principio el hombre logró que su petición sea aceptada por la justicia; sin embargo, la mujer impugnó, dijo que no estaba de acuerdo con el divorcio y estaba dispuesta a cuidarlo hasta su vejez
“Hasta que la muerte los separe”, la inmortalizada frase que se repite a aquellas parejas que contraen nupcias cobra especial sentido para Nirmal Singh Panesar quien desde hace casi 30 años ha buscado la manera de separarse de su esposa, Paramjit Kaur Panesar; sin embargo, ha fracasado en su intento.
La historia de esta pareja se remonta a 1963, cuando esta pareja de la India contrajo matrimonio, según el portal Mint. En principio todo era color de rosa, llegaron incluso a tener dos hijos; sin embargo, la situación comenzó a cambiar en 1984.
Resulta que Nilmar es médico y oficial retirado de las Fuerzas Armadas de su país. En principio ejercía sus labores en la Escuela Central de Amritsar; sin embargo, en el 84 fue destinado a la ciudad de Chennai.
El hombre asegura que su esposa negó cambiar de ciudad y más bien se quedó a vivir con sus padres y luego con sus hijos. Agregó que trataron de solucionar sus problemas; sin embargo, pese a los intentos, asegura que fue imposible.
Fue en 1996 que Nirmal solicitó el divorcio y cuatro años después recibió un veredicto favorable, pero fue anulado tras una apelación de su esposa, quien argumentó que había hecho todo lo posible para mantener su “relación sagrada”.
Desde entonces, el hombre buscó la manera de que su caso sea revisado por la Corte Suprema de su país y este 2023 finalmente logró que así sea; sin embargo, el resultado no fue el que esperaba y la Justicia nuevamente le negó el divorcio, si bien se aceptó que el matrimonio estaba “más allá de la salvación”, consideraron que eso no bastaba para justificar un divorcio.
En la India el divorcio es considerado un tabú y la nulidad legal del matrimonio suele obtenerse únicamente en casos probados de violencia o crueldad por parte de uno de los cónyuges, de hecho solo uno de cada 100 matrimonios termina en separación por ley.
”No sería deseable aceptar la fórmula de la ‘ruptura irreparable del matrimonio’ como una camisa de fuerza para la concesión del divorcio”, concluyeron los dos jueces.
El fallo también tuvo en cuenta a la esposa, quien señaló que no estaba de acuerdo con el divorcio y se mostró dispuesta a cuidar de él en su vejez. Además, señaló que no quería morir con el “estigma” de ser divorciada.
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