Durante la apertura de la reunión del Consejo Nacional de Autonomías en la Casa Grande del Pueblo en La Paz, el presidente, Luis Arce, reconoció este miércoles la existencia de una crisis hídrica y atribuyó parte de la responsabilidad a la falta de apoyo por parte de la Asamblea Legislativa, afirmando que la aprobación de leyes más ágiles habría permitido una respuesta más efectiva.
El mandatario también mencionó los esfuerzos realizados para obtener financiamiento internacional y recursos para abordar la crisis hídrica, pero lamentó que algunos de estos desembolsos no se aprobaron en el Legislativo.
“No ha habido el suficiente acompañamiento de nuestra Asamblea Legislativa en la aprobación de leyes que nos hubieran permitido ser mucho más ágiles y poder satisfacer con mayor prontitud las numerosas demandas que hoy por hoy empezamos a recibir de diferentes municipios cuando se van declarando en emergencia por el tema del agua”, afirmó.
Además, enfatizó que la Constitución Política del Estado establece responsabilidades y competencias en todos los niveles del gobierno, no solo a nivel central, sino también a las entidades subnacionales.
En el Consejo, Arce convocó a los alcaldes de todos los departamentos para abordar la preocupación del Gobierno nacional sobre la escasez de agua y la necesidad de inversiones para resolver el problema. Hizo hincapié en que la crisis hídrica es un problema recurrente y que se espera que se intensifique en los años venideros debido a problemas ambientales globales, de los cuales Bolivia no es ajena.
La reunión no contó con la participación de los gobernadores de Santa Cruz, Beni y Tarija, quienes estuvieron ausentes por diferentes motivos, incluyendo razones de salud y viaje. El jefe de Estado instó a las autoridades presentes en el Consejo a tomar decisiones informadas para abordar la grave situación del agua en el país.
Los Tiempos y agencias